Los Mariners, que aprovecharon la ocasión para dar oportunidades a los jugadores que disfrutaron de menos minutos durante la temporada, hicieron valer su condición de favoritos y cumplieron los pronósticos.

La competición, en sistema de triangular, estuvo marcado por el calor que hizo durante todo el día, y se inició con el choque entre los dos equipos portugueses. Los Lisboa ADB Crusaders, tras remontar en el tercer cuarto, sorprendieron a los Oporto Renegades quienes en principio partían como favoritos en el derby luso.

El segundo partido enfrento a los Crusaders con los Mariners y desde un principió la superioridad de la línea de ataque y de la defensa de los asturianos se puso de manifiesto destacando el linebacker Jose Abad con 2 sacks prácticamente consecutivos al inicio del partido que marcaron la tónica del choque. Las carreras de los running backs gijoneses desbordaban una y otra vez a la defensa lisboeta y poco a poco los puntos iban subiendo al marcador hasta el 53-0 final.

Sin mucho tiempo para la recuperación se inició el último y definitivo partido entre Renegades y Mariners. Los locales aguantaron el primer cuarto pero en el segundo los asturianos abrieron la brecha que será definitiva. Al final 33-13 para los gijoneses.